Beverly -más conocida por sus amigos y familiares como Bevy- es puro sol envuelto en un tutú y unas zapatillas brillantes. ¡Su personalidad juguetona tiene una forma mágica de convertir los momentos cotidianos en celebraciones!
Con sólo 10 meses de edad, Bevy se enfrentó a un gran reto cuando le diagnosticaron una meningitis bacteriana que le provocó la pérdida de la audición. Aquello fue sólo el principio de su historia, no el final. Después de recibir implantes cocleares, Bevy se disparó hacia adelante, dominando tanto el lenguaje de signos americano como el lenguaje hablado, y luego prosperando en la escuela con confianza y alegría.
Ya sea abogando por sí misma, guiando a los visitantes del aula en una visita o deslumbrando a su familia con un concierto en el salón, demuestra a diario que la determinación vence a la duda en todo momento. Es una niña que dice: “¡Puedo hacerlo!”, y luego lo hace con una sonrisa.
Este año, Bevy alcanzó otro hito: ¡aprender a montar en bicicleta sin ruedines! Incluso después de unas cuantas volteretas el año pasado, no dejó que el miedo la detuviera. Gracias a su gran esfuerzo y a los ánimos de su padre, Bevy corre ahora tan rápido que apenas puede seguirle el ritmo.
Los días de Bevy están llenos de música, sesiones de maquillaje, aventuras al aire libre y mucho baile: este año está tomando clases de claqué, ballet y jazz y le encanta cada paso. Encuentra la alegría en todas partes y la comparte generosamente, dejando un rastro de risas y amabilidad allá donde va.
Al cambiar el mundo a su alrededor, Bevy inspira a su familia a ver las cosas a través de una lente diferente: una que valora la inclusión, celebra la resiliencia y defiende el derecho de cada niño a ser lo mejor de sí mismo. Ella enseña a los demás que las diferencias no son barreras; son hermosas.
Mirando hacia delante, su familia ve un futuro en el que Bevy seguirá persiguiendo grandes metas, defendiéndose a sí misma y a los demás, y viviendo con valentía. Saben que no hay nada que ella no pueda hacer.
Family Connection de Carolina del Sur proporciona servicios y recursos a las familias que tienen un hijo con una discapacidad o una necesidad sanitaria especializada. Desde 1990 hemos atendido a más de 100.000 familias y hoy nuestros servicios son más necesarios que nunca. Nos centramos en el apoyo entre padres, la orientación para navegar por el complejo sistema sanitario y la ayuda con las reuniones escolares y los planes de educación especial.