Rosemary, estudiante de segundo de bachillerato, se deleita con su recién descubierta independencia y con los pasos que ha dado para vencer sus miedos. Cada día, navega por los pasillos de su escuela con creciente confianza. Desde entrar en la escuela desde la fila del coche compartido hasta llegar a su clase sin supervisión, Rosemary disfruta de sus logros.
Rosemary tiene un diagnóstico dual de síndrome de Down y autismo. Gracias a sus sesiones de terapia ABA, aprendió a tomar decisiones que no sólo la beneficiaban a ella, sino a todos los que la rodeaban. Su trabajo duro y su perseverancia no sólo mejoran su comportamiento sino que también inspiran a los que la rodean.
Los sueños de Rosemary no tienen límites. Desde su fascinación por el antiguo Egipto hasta su deseo de convertirse en médico, absorbe los conocimientos con avidez y aprovecha cualquier oportunidad para aprender. Su amor por la vida es contagioso, ya sea corriendo, saltando o bailando sus canciones favoritas.
Rosemary se mantiene erguida, segura de su lugar en el mundo. Se niega a ser definida por las percepciones de los demás, abrazando su singularidad sin complejos. Para Rosemary, ser diferente no es un contratiempo, sino una fortaleza.
Family Connection de Carolina del Sur proporciona servicios y recursos a las familias que tienen un hijo con una discapacidad o una necesidad sanitaria especializada. Desde 1990 hemos atendido a más de 100.000 familias y hoy nuestros servicios son más necesarios que nunca. Nos centramos en el apoyo entre padres, la orientación para navegar por el complejo sistema sanitario y la ayuda con las reuniones escolares y los planes de educación especial.